INTERIORISMO

Interiorismo corporativo de Restaurante Pracer a cargo de Iván Cotado

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Una vez más, os traemos un proyecto de Iván Cotado que en esta ocasión ha sido encargado del diseño del Restaurante Pracer, una propuesta disruptiva que goza del reconocimiento hostelero en Galicia aupado a una apuesta gastro musical donde la calidad es el santo y seña. Y Cotado ha acentuado ese perfil con su trazo inconfundible.

El diseño supuso un reto ya que se tenía que adaptar a un local difícil, con una morfología trapezoidal irregular, una superficie reducida y un pilar en el mismo centro del espacio.

Para recoger ese aire canalla, Iván Cotado trabaja desde el principio en un «espíritu underground inspirado en los espacios industriales berlineses de los 90. Siempre hay contenido detrás de un buen INteriorismo EStratégico.»

Fotografías: Iván Casal Nieto

Se dispone una barra central en «U» que subraya el espectáculo gastronómico y facilita la atención directa por parte del cocinero. Con ello se facilita esa filosofía de poco personal, contacto directo con el cocinero etc. que trata de lograr el Pracer.

 

Truss para la iluminación central, lámparas a partir de platos de batería y una adusta paleta de materiales inspirada en el espíritu underground de los espacios industriales berlineses post caída del muro.

Sin duda, en el Restaurante Pracer uno tiene la sensación de no estar en un establecimiento al uso. Su propuesta gastronómica, su filosofía de experiencia del cliente, su apuesta musical, su lenguaje visual… Todo ello requería igualmente de un diseño del espacio acorde al nivel de intención que lleva implícita toda la idea de negocio de este local.

Con Iván Cotado, se acierta de pleno en la elección del interiorismo. Creatividad, sagacidad, originalidad en el uso de materiales, el planteamiento de la iluminación, la tendencia de la propuesta, la disposición de los elementos… todo combina de manera magistral con la idea de sorprender al cliente que se marca Pracer.

Un ejemplo más de que el interiorismo corporativo, no es un artificio sino un verdadero puente hacia la mejor experiencia del cliente. Sin duda, una inversión que todo negocio debería valorar.